Londres es una de las ciudades más visitadas del mundo y no es por casualidad. En la capital británica puedes encontrar una gran variedad de monumentos que visitar y actividades de todo tipo, por lo que se convierte en un destino apto para todos los públicos.

Tanto si es tu primera vez en Londres como si ya has visitado esta ciudad, en el este post te damos las claves de qué ver y qué hacer en Londres en una semana para que no te pierdas ninguno de los principales atractivos de la capital británica, sin duda una de nuestras ciudades favoritas de toda Europa.

Día 1

Para el primero de los días nada mejor que un recorrido a pie por el centro de Londres para tomar contacto con la ciudad.

Este recorrido comienza en la estación de Liverpool Street, en plena city londinense y pasando por Leadenhall Market, uno de los escenarios de las películas de Harry Potter en Londres y llegando hasta Tower Hill, donde se encuentra la famosa Torre de Londres y que se puede entrar a visitar de forma gratuita con la London Pass. (Si lo prefieres, puedes sacar la entrada aquí).

También se puede visitar allí mismo Tower Bridge, uno de los puentes más famosos y fotografiados del mundo.

Al otro lado del puente se encuentra el Ayuntamiento y muy cerca de allí, Borough Market, una de las zonas más animadas de la ciudad y un buen lugar para parar a tomar un tentempié y disfrutar del ambiente del Southbank.

Después, puedes seguir por Queen’s Walk bordeando el río Támesis. En este paseo te encontrarás con el Teatro Globe, la reconstrucción del edificio en el que Shakespeare puso en escena muchas de sus obras.

Junto a él, se encuentra la Tate Modern, uno de los museos de visita obligada en Londres y puede que nuestro favorito. Allí se exponen algunas de las obras más relevantes de las vanguardias artísticas de finales del siglo XIX y principios del siglo XX.

Cruzando Millenium Bridge llegarás a la Catedral de St.Paul que también se puede visitar con la London Pass.

Volviendo de nuevo a la orilla de la Tate Modern y siguiendo la misma llegaréis al London Eye, una de las atracciones más conocidas de Londres y desde la cual se obtiene una bonita panorámica de la ciudad. Os recomiendo sacar aquí la entrada sin colas, ya que os ahorraréis mucho, pero mucho tiempo de espera.

Un poco más adelante y pasando por Westminster Bridge, se encuentra la Abadía de Westminster y el famoso Big Ben. La abadía se puede visitar con la London Pass.

Para terminar el día puedes acercarte hasta St. Jame’s Park, donde se localiza el Palacio de Buckingham o dirigirte hasta Trafalgar Square, donde se encuentra la National Gallery o visitar la animada zona de Covent Garden.

Día 2

El segundo día en Londres comienza con la visita al Museo Británico, uno de los referentes museísticos de todo el mundo. La visita puede ser tan larga como quieras, aunque si quieres aprovechar el día para ver otros monumentos de la capital británica lo mejor es que vayas a las salas que más te interesan. Aquí os dejamos un recorrido rápido por el museo británico, que no os llevará muchas horas. También podéis contratar una visita guiada en español aquí.

Después, puedes dar una vuelta por Covent Garden y acercarte a Neal’s Yard, una encantadora plazoleta repleta de casitas de colores.

Desde Leicester Square, y después de haber dado una vuelta por el Soho puedes dirigirte en metro hasta Camden, una de las zonas más famosas de Londres y comer en su mercado.

No dejes de pasear por Regent’s Park ni de acercarte a Primrose Hill desde donde hay unas bonitas vistas del skyline de la ciudad.

También puedes realizar un pequeño paseo hasta Little Venice siguiendo el recorrido del canal que se va adentrando desde el bullicio de Camden y como un sendero verde en la más absoluta tranquilidad. Un paseo muy recomendable del que podéis leer más aquí.

Además y no muy lejos de allí se encuentra Abbey Road, una parada imprescindible para los fans de los Beatles, quienes encontrarán aquí el famoso paso de cebra de los Beatles.

De vuelta al centro de Londres puedes aprovechar para disfrutar del ambiente de Chinatown, el Soho o el increíble Carnaby Street al caer la tarde.

Día 3

El tercero de los días nos lleva hasta el popular barrio de Notting Hill donde además de los escenarios de la película de Notting Hill, no os podéis perder el famoso mercadillo de Portobello Road que es recomendable visitar en viernes o sábado ya que es cuando más puestos hay. Se trata de un mercado de antigüedades que se celebra desde el siglo XIX aunque hoy es posible encontrar casi de todo.

Después, dirígete hasta Hyde Park, donde además de hacer un picnic si el día es soleado, puedes visitar el Palacio de Kengsinton, donde vivió en su día Lady Di, y que cuenta con unas interesantes exposiciones y jardines.

Muy cerca se encuentran dos de los museos imprescindibles de Londres: el Museo de Historia Natural y el Victoria and Albert.

El Museo de Historia Natural está dedicado a las Ciencias Naturales y es muy buena visita para ir con niños ya que, además de la esperada sala de los dinosaurios hay fósiles, animales marinos y una buena colección de minerales.

El Victoria and Albert, está dedicado a las artes decorativas desde la forja o el vidrio hasta la escultura con algunas salas realmente impresionantes.

Aprovechando la ocasión, y ya que no está demasiado lejos, no dudes en hacer una visita a los famosos almacenes Harrod’s en Brompton Road.

Además, puedes continuar por Piccadilly avenue hasta la famosa plaza de Piccadilly Circus para ver sus carteles iluminados bajo el cielo nocturno.

Día 4

A las 11:30 tiene lugar todos los días desde mayo hasta junio el famoso Cambio de Guardia en el Palacio de Buckingham (el resto del año se realiza cada dos días). Se trata de uno de los eventos a los que más turistas acuden, por lo que hay que llegar con bastante tiempo para coger un buen sitio.

Si madrugas puedes visitar antes el Churchill War Rooms, un museo ubicado en las salas desde donde Winston Churchill y su gabinete de guerra dirigieron la ofensiva aliada que condujo a la victoria en la Segunda Guerra Mundial.

Aprovechando la ocasión también puedes acercarte al número 10 de Downing Street, donde tiene su residencia oficial el Primer Ministro de Reino Unido. Evidentemente solo podrás acercarte a la valla que, como un fuerte, rodea la famosa fachada de ladrillo negro, pero se trata de una de las visitas obligadas en Londres.

Por la tarde, un plan solo apto para fans de Harry Potter: el Harry Potter studios tour. Se trata de la visita a los estudios de grabación de las películas de la saga escrita por J.K. Rowling. Se encuentran en Watford Junction, una localidad cercana a Londres y es una visita ideal para viajar con niños ya que se recorren los momentos y escenarios más destacados de las películas y ¡hasta se puede probar la famosa cerveza de mantequilla!

Puedes leer más sobre la visita a los estudios de Harry Potter aquí. O si ya tienes claro que vas a ir, puedes sacar tus entradas pulsando aquí. Hay que hacerlo por internet y con algo de tiempo de antelación.

Día 5

Este día está dedicado a visitar Greenwich. Una localidad en otro tiempo cercana a Londres pero que hoy se ha integrado perfectamente en su área metropolitana.

Llegar hasta Greenwich es muy fácil gracias al DLR (Docklands Light Railway). Solo hay que cogerlo en la céntrica estación de Bank y bajarse en Cutty Sark. Otra opción para llegar hasta allí son las excursiones en barco que parten del London Eye y una vez en Greenwich recorren los monumentos en una visita guiada. Podéis comprar los tickets aquí.

Al poco de salir del metro te llamará la atención un gran barco, bien, es el Cutty Sark,  uno de los últimos veleros rápidos que se utilizaba para transportar té de China y que se puede visitar.

Junto a él se encuentra el Museo Marítimo Nacional, el más importante de Reino Unido y que cuenta además de con objetos relacionados con el mar, con retratos de importantes marineros como el el vicealmirante Horatio Nelson o el capitán James Cook.

Por supuesto, no os podéis perder el Old Royal Naval College, el que fuera uno de los palacios favoritos de Enrique VIII y hoy, uno de los monumentos más impresionantes de Greenwich y donde se puede visitar la Capilla Real y el Painted Hall.

En los alrededores de la estación de metro, en Durnford Street, se encuentra Greenwich Market. Puede ser una buena oportunidad de comprar algún souvenir o de comer en alguno de sus puestecillos.

Después, podéis visitar Queen’s House, lo que fue en su inicio uno de los primeros edificios clásicos de Reino Unido, residencia real y hasta un hospital. En él se exponen parte de las obras de pintura marítima del museo.

Por último, no hay que dejar de adentrarse en el parque de Greenwich hasta llegar al Real Observartorio, una de las atracciones turísticas más importantes de Greenwich, ya que allí se alberga el Meridiano Cero.

Día 6

El día de hoy lo puedes dedicar a visitar el Castillo de Windsor ya que tanto la entrada como el billete de tren, primero hasta Slough y después hasta Windsor & Eton central están incluidos en la London Pass así como el acceso al recinto sin hacer fila.

El Castillo de Windsor es una de las residencias habituales de la familia real británica y se ha convertido en el palacio real europeo habitado más antiguo. Si no tienes la London Pass o prefieres hacer un tour en español con los traslados incluidos, aquí puedes contratar la visita.

El resto del día puedes dedicarlo a visitar Trafalgar Square y la National Gallery que junto con la National Portrait Gallery (situada al lado) son dos de los museos de Londres que no te puedes perder.

Día 7

El último de los días puedes dedicarlo a hacer una excursión a Cambridge, ciudad universitaria por excelencia y muy bien comunicada con Londres, que puedes ver fácilmente en un día.

Aunque lo mejor es callejear y ver el ambiente de la ciudad, si hay un monumento que no te puedes perder es el King’s College cuya capilla es una obra maestra del estilo gótico inglés.

Para conocer en profundidad qué ver y qué hacer en Cambridge lee el siguiente post.

Aunque 7 días en Londres dan para mucho, todavía quedan cosas que ver. Los más futboleros podéis aprovechar para realizar la visita a alguno de los estadios de la ciudad como Wembley, el Emirates Stadium, Stamford Bridge o el estadio del Fulham, Craven Cottage, el más antiguo de la ciudad.

También podéis realizar excursiones a otras ciudades cercanas como Oxford o Norwich.

En fin, que Londres es una ciudad con muchísimas posibilidades y cientos de actividades para realizar, así que cualquier excusa es buena para visitarla. Eso si, si tenéis pensado visitar la mayoría de monumentos de Londres, no dudéis en comprar la tarjeta London Pass, pues sin duda os hará ahorrar bastante dinero. (La puedes comprar aquí) Si solamente vais a ver algunas cosas en concreto, aquí os dejo los distintos tours y visitas guiadas en español que se hacen en la ciudad, por si os interesa contratar alguno.

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