Qué ver y qué hacer en Lucca

En nuestro viaje relámpago por la Toscana decidimos acercarnos a conocer Lucca, una pequeña ciudad amurallada llena de encanto. Esta ciudad de menos de 90000 habitantes se encuentra situada a unos 20 kilómetros de Pisa y en tren cuesta llegar hasta ella solamente 30 minutos. Lucca, es conocida como la ciudad de las 100 torres, por la cantidad de torres que tiene, y resulta ser una visita sorprendente, llena de cultura e historia, siendo una escapada perfecta para pasar el día si te encuentras por la zona.

En esta entrada voy a contaros las principales cosas que ver y que hacer en Lucca, para que saquéis provecho de un día conociendo la ciudad.

Qué ver y qué hacer en Lucca

Subir a la Torre Guinigi

La Torre Guinigi es uno de los símbolos más representativos de la ciudad de Lucca. En lo alto de la torre se puede ver un jardín arbolado lo que la hace reconocible de lejos. La torre de 44 metros de altura se puede visitar, y subiendo sus 230 escalones permite conocer un bonito mirador con unas vistas de 360 grados de la ciudad. La entrada solo cuesta 4 Euros y merece mucho la pena, siendo una de las cosas imprescindibles que hacer en Lucca. Eso si, es recomendable reservar hora, lo que se puede hacer allí en el mismo día.

– Visitar la Catedral de San Martin

Esta catedral, en italiano llamada el Duomo di San Martino. Es una de las joyas de la ciudad de Lucca, se encuentra en la plaza del mismo nombre. Destaca su preciosa fachada realizada con el típico mármol blanco característico de la zona y la altísima torre del campanario. Se puede visitar y subir a la torre.

– Tomarse un descanso en la Plaza del Anfiteatro

Esta bonita plaza debe su nombre a que esta construida sobre un antiguo anfiteatro romano, de ahí su forma elíptica y antiguamente albergaba el mercado de la ciudad. Está formada por edificios de viviendas pintadas en vivos colores amarillos con ventanas verdes y en sus bajos puedes encontrar numerosos restaurantes, caferías y tiendas lo que la hace un lugar muy pintoresco y perfecto para sentarte a tomar algo en una de sus muchas terrazas.

– Admirar la Iglesia de San Miguel en Foro

Esta impresionante iglesia, además de ser una de las principales iglesias de Lucca, es para mi gusto es la mas bonita de la ciudad. Esta dedicada a San Miguel y fue construida sobre el antiguo foro romano. Se encuentra en la Plaza de San Miguel y es de estilo románico pisano, cubierta de mármol blanco. Destaca su fachada principal del siglo XIII  llena de columnas, arcos y esculturas en ese color de mármol blanco tan particular de la zona de la Toscana.

– Conocer la Basílica de San Frediano

La basílica de San Frediano es una de las iglesias mas antiguas de la ciudad de Lucca y se encuentra en la plaza con el mismo nombre. Destaca su fachada en la que puedes ver a lo alto de su nave central un pentágono decorado con un precioso mosaico dorado que representa la Ascensión de Cristo.

– Pasear por la Muralla de Lucca

La ciudad de Lucca es conocida también por ser una ciudad amurallada. El casco antiguo de la ciudad se encuentra dentro de las murallas, las cuales a pesar de ser construidas para ser defensivas nunca fueron utilizadas de ahí que se conservan perfectamente, hoy en día es una zona ajardinada que ofrece un bonito paseo para recorrerlas.

Además, puedes conocer alguna de las puertas que sirven de acceso como Porta Elisa, Porta San Donato, Porta San Pietro o Porta Santa Maria.

– Visitar la Casa natal-Museo de Puccini

El gran compositor italiano Giacomo Puccini conocido por muchas de sus obras como Tosca o La Bohéme, era natural de Lucca. Es aquí donde nació, creció y se formó como músico. En este museo puedes admirar mobiliario de la época, fotografías, ropa, partituras y hasta su piano entre otros muchos objetos. Además cerca del museo, en la placita contigua puedes encontrar una estatua de bronce del compositor.

– Subir a la Torre Delle Ore

Esta torre de 50 metros de altura es la más alta de Lucca. Esta ubicada en Via Fillungo la calle comercial por excelencia de la ciudad. La función de esta torre era ser el reloj de la ciudad, en la actualidad el reloj que se puede ver a lo alto se instaló en 1754 y todavía hoy en día se da cuerda a mano. Esta torre al igual que la de Guinigi se puede visitar y a través de 207 escalones ofrece un maravilloso mirador con la sorpresa que subiendo se puede ver todo el mecanismo del reloj y su funcionamiento.

– Descubrir la Piazza Napoleone y el Palacio Ducal

La Piazza Napoleone es la mayor plaza de Lucca y conocida popularmente por la Plaza Grande. Siempre fue el centro político de la ciudad y en ella se encuentra el Palazzo Ducale que hoy en día alberga las oficinas de la provincia. Su nombre se debe a que fue dedicada a Napoleon por su hermana Elisa Bonaparte la cual desde 1805 hasta 1815 dirigió el Principado de Lucca. Actualmente en los meses de verano se realizan eventos culturales, conciertos y se ponen mercadillos.

El Palacio Ducal de Lucca fue mandado construir por Elisa Bonaparte en 1806 para presidir la plaza Naponeón, y sirviera de referente de la vida pública y política de Lucca en el siglo XIX. Hoy, sirve de centro de exposiciones además de acoger en su interior el Museo del Resurgimiento de Lucca, el Museo Paolo Cresci para la historia de la emigración italiana y la exposición permanente de «La Nariz y la Historia» donde pueden olerse distintas fragancias que recuerdan la vida y los acontecimientos históricos de las dos mujeres famosas que reinaron en Lucca, Elisa Baciocchi y Maria Luisa de Borbon.

– Recorrer Via Fillungo

Via Fillungo es la calle principal que cruza todo el centro histórico de Lucca. En ella se encuentra la calle del reloj y numerosos palacetes de época. Es una calle sinuosa, estrecha y de aspecto medieval. Es una calle comercial llena de comercios históricos como heladerías, restaurantes, cafeterías, así como tiendas de productos típicos, ropa y de recuerdos.

– Visitar el Orto botánico de Lucca

El jardín botánico de Lucca se encuentra próximo a la muralla y fue creado en 1820 para destinarlo como uso científico de la universidad de Lucca. En el puedes ver el gran Arboretum, un jardín de enormes arboles centenarios, la escuela botánica, con una gran colección de plantas medicinales, diversos invernaderos tanto antiguos como más modernos, una biblioteca, un museo y un estanque.

-Plaza Geminiani

La plaza debe su nombre al compositor Francesco Geminiani, músico, compositor, violinista, teórico y pedagogo nacido en la ciudad de Lucca en 1687. Una estatua del compositor viste el centro de la plaza.

-Palacio Pfanner

El Palacio Pfanner es uno de los palacios más famosos de Lucca. Inicialmente conocido como Palacio Controni, hoy es la sede del museo de arte y artefactos. Pero lo que llama especialmente la atención es su impresionante jardín, una de las joyas escondidas de Lucca.

-Plaza Risorgimento

Situada fuera de la muralla de Lucca, justo enfrente de la puerta de San Pedro, en esta plaza se encuentra el monumento ecuestre que simboliza a la Patria ganadora. Es una obra del escultor Alfredo Angeloni.

-Iglesia de San Romano

La iglesia de San Romano se encuentra en la plaza del mismo nombre, y forma parte de uno de los conventos más antiguos de toda Lucca. La iglesia fue consagrada en 1281, y en su interior se encuentran enterrados varios nobles de la época.

-Museo Italiano del Cómic y la Imagen

Situado en la antigua sede de lo que fue el cuartel Lorenzini, abrió sus puertas en el año 2008, con la idea de combinar fantasía, realidad y modernidad. Actualmente, y desde 2014 permanece en parte cerrado por obras de renovación. Es aquí donde tiene lugar también la bienal de Lucca.

-Plaza del Giglio

Situada en el centro de la ciudad y a escasos metros del Palacio Ducal, la plaza del Gigliio es conocida también como la Plaza Garibaldi, por la escultura que viste en centro de la plaza. Se trata de una abra de mármol blanco realizada por el artista local Lucchesi.

-Estatua Vittorio Emanuele II

Tras la muerte de Vittorio Emanuele II la ciudad de Lucca decidió hacerle una estatua en su honor, no en vano había sido el primer rey de Lucca. Se convocó un concurso en el que distintos artistas mostraban sus bocetos y el escultor elegido para representar al rey fallecido fue el artista Augusto Passaglia. Aunque en principio la estatua se iba a hacer en mármol, finalmente se realizó en bronce. Tras un estudio riguroso sobre el lugar donde iba a ser colocada, al final se decidió que la escultura presidiera el descenso del Baluardo de Santa María.

– Iglesia de San Francisco

Se trata de una iglesia católica de la orden de los franciscanos, quienes tuvieron un papel relevante en la vida de Lucca en el siglo XIII. Está situada en la plaza del mismo nombre, y en su interior puden verse las tumbas del compositor Luigi Boccherini y del Duque de Lucca, Castruccio Castracani degli Antelminelli.

– Iglesia de Santa Maria Blanca

La iglesia, situada en la plaza del mismo nombre, fue levantada en el siglo XII, aunque fue remodelada posteriormente. Recibe el sobrenombre de «Foris Portam» (fuera de la puerta), en referencia a su ubicación, inicialmente fuera de las murallas de Lucca.

– Iglesia de San Giovanni e Reparata

Se trata de una de las iglesias más históricas de todo Lucca. Fue construida en el siglo IV para ser la catedral de Lucca, y mantuvo ese estatus hasta el siglo VIII. Hoy, además de iglesia, sirve de museo, pues además de sus bonitas capillas, en su interior conserva varios restos de la vieja ciudad de Lucca, entre los que destacan una domus romana del siglo I a.C., y unos baños termales del siglo I y II d.C. Para visitarla hay que pagar entrada.

– Iglesia de San Pedro Somaldi

Esta iglesia católica está situada en la plaza del mismo noombre. Fue fundada en el siglo VIII por Summal, de ahí su nombre, aunque fue reconstruida en el siglo XII. En su puerta central destaca un dintel donde se recrea la entrega de llaves a San Pedro.

– Iglesia de San Salvador

Edificada en el año 1009 aunque posteriormente reconstruida en el siglo XII. Esta iglesia se encuentra, al igual que practicamente todas las anteriores en la plaza del mismo nombre. En su fachada destaca un bajorrelieve del maestro Bilduino, dedicado a la figura de San Nicolás.

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