Existen cementerios en el mundo que son auténticas obras de arte y el cementerio Père Lachaise en París es un buen ejemplo de ello, con tumbas de todo tipo y esculturas imposibles adornando algunas de sus lápidas. Por si eso fuera poco son muchos los nombres ilustres que este cementerio acoge en su interior y que sirven de reclamo para que muchos turistas y curiosos se acerquen hasta aquí.

Las catacumbas de París se han convertido en una de las atracciones turísticas más demandadas de la ciudad. Lo normal es encontrarse con una gran fila para poder entrar a verlas, o madrugar para intentar salvarla. Y es que no podemos negar que a muchos nos puede la originalidad y el morbo de ver este gigantesco osario escondido bajo una de las ciudades más turísticas y cosmopolitas del mundo.