Visitar los jardines de Bóboli es sumergirse en el interior del más amplio espacio verde de Florencia. Un paseo entre fuentes, lagos, esculturas y plantas. Un remanso de paz dentro del bullicio del centro de Florencia. Y todo ello, bajo el amparo de la casa Médici, creadores de este espacio.
Recorrer el interior de los jardines de Bóboli es una de las muchas cosas que hacer en Florencia. Así es su visita.
Visitar los jardines de Bóboli
Para visitar los jardines de Bóboli deberemos acudir al Palacio Pitti, uno de los iconos de la ciudad. Los jardines de Bóboli son de pago, y su creación pertenece a la familia Médici, quienes compraron en 1550 en Palacio Pitti a los Pitti y decidieron ampliar los jardines que tenía el palacio, construyendo un espacio verde de 45000 metros cuadrados que se ha convertido en el parque más grande de toda Florencia y uno de los más elegantes de toda Italia. Tal vez por ello muchos comparan a los Jardines de Bóboli con los jardines del mismísimo Palacio de Versalles.
Los jardines de Bóboli están situados en la parte suroeste del palacio y comprenden el terreno que va desde el propio palacio Pitti hacia la Porta Romana y el Forte Belvedere formando una especie de museo al aire libre por la cantidad de esculturas que encontramos a lo largo del paseo.
Los jardines de Bóboli siempre han sido un espacio glamuroso, sede de muchas fiestas de la alta sociedad florentina, y un espacio de separación entre clases. De ahí tal vez la elegancia del lugar, de sus fuentes, grutas y de sus cientos de esculturas.
Fue diseñado por el arquitecto Niccolo Tribolo, quien con la ayuda de los artistas Bartolomeo Ammanati, Giorgio Vasari y Bernardo Buontalenti dieron forma y diseño a este lugar.
De entre las obras que podemos encontrar repartidas entre los jardines, destaca la fuente del Océano, donde se representa a Neptuno rodeada por los dioses mentirosos que representan a los ríos Nilo, Ganges y Éufrates, y que vierten sus aguas en el gran tanque que forma la fuente y que representa al océano.
Otra de las fuentes más famosas del recinto de los jardines de Bóboli es la que representa al enano Morgante y que se conoce como la Fuente Bacchino. En ella aparece Morgante, quien de bufón de la corte de los Médici llegó a ser asesor personal de la familia. Tampoco hay que dejar de ver la Gruta del Buontalenti, una falsa cueva decorada en estilo manierista y que se encuentra muy cerca de una de las salidas de los jardines.
Los jardines de Bóboli puedes visitarlos por libre previo pago de entrada, o realizar una visita guiada por su interior con entrada incluida, según estés más o menos interesado en conocer la historia y los pormenores del lugar.
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