En Lisboa, en el barrio de Belém, y no demasiado lejos de los Jerónimos nos encontramos con el Museo Nacional del Carruaje, un museo que a pesar de ser de una temática fuera de lo habitual, se ha convertido en el museo más visitado de Portugal.
Ubicado en el interior de lo que un día fue una escuela de equitación, alberga una importante colección de carruajes y carrozas de los siglos XVII, XVIII y XIX, pertenecientes a la realeza y a otras personalidades de la época, lo que le ha hecho ser considerado como la mejor colección del mundo dentro de su temática.
El Picadeiro Real do Palacio de Belém, como se llama la escuela a pesar de que suena como suena, fue construido en 1787 por el arquitecto italiano Giacomo Azzolini. El amplio salón era utilizado como arena para los caballos mientras que desde los balcones del piso superior la familia real disfrutaba de los espectáculos ecuestres.
El actual museo dos coches fue inaugurado en 1905 por deseo de la reina Amalia de Orleans, y en su interior destacan varios carruajes. Uno de los más importantes es el perteneciente al rey español Felipe III, el cual además es el carruaje más antiguo del museo.
Otros de los carruajes que pueden verse en el interior son las carrozas de boda utilizadas por María Ana de Austria en su boda con Joao V, y de María Francisca Benedeta en su enlace con el príncipe D.José.
Muy curioso resulta también el carruaje Troca de princesas (Trueque de princesas) por la historia que tiene detrás. Y es que este carruaje fue usado para realizar el intercambio matrimonial entre Portugal y España, quienes se intercambiaron a las infantas hijas de D.Joao V y de Felipe IV cerca de la frontera, para su casamiento con Fermando VII y con José I respectivamente.
No solo de la realeza son las carrozas expuestas en el museo. Fuera de ella, destacan las tres carrozas del Papa Clemente XI, datadas de 1716. Además de todos estos carruajes, dentro del museo son varios los retratos y objetos de época que pueden verse colgados de sus paredes.
El museo abre sus puertas de martes a domingo en horario de 10 a 18. El precio de la entrada para adultos es de cinco euros, aunque si dispones de la Lisboa Card, la entrada está incluida.
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Nosotros también le dedicamos una entrada hace ya tiempo a este sorprendente museo, uno de los mejores de su género. Su ubicación y lo bien organizado que está, además de mostrar una colección diferente, lo hacen muy atractivo para todo el público, razón, imagino de su éxito. A nosotros nos gustó mucho.
Saludos!
Es muy curioso. Los carruajes son una pasada, impresiona su tamaño y la multitud de adornos que tienen. Es una visita obligatoria en Belém. Saludos
Pues no conocía yo su existencia… La verdad es que es un museo muy curioso. Ya se ve por qué es el más visitado del país. Me lo anoto por si algún día voy por allí.
Un saludo 😉
Vale la pena visitarlo. Las carrozas son espectaculares! A mí lo que más me sorprende es que sea el más visitado del país, eso sí no me lo esperaba para nada, jeje. Qué cosas!!! Saludos
No tenía ni idea de la existencia de este museo, pero la verdad es que es muy interesante!! Otro plan más para hacer en Lisboa.
Un saludo!
Vale la pena, pues es curiosi y las carrozas son realmente impresionantes! El lugar es perfecto para visitar el mismo día que ves la zona de Belém. Vale la pena! Saludos