Si estás buscando un sitio donde dormir en Chester no busques más, The Grosvenor Place tiene todo lo necesario. Y es que muchas veces es difícil encontrar el equilibrio entre un alojamiento bien de precio, céntrico y agradable, pero todo esto se da en The Grosvenor Place, el lugar que elegimos nosotros para alojarnos en la encantadora ciudad de Chester, un destino a muy pocos kilómetros de Liverpool y perfecto para combinar con una escapada a la cuna de los Beatles.

The Grosvenor Place es un lugar ideal para dormir en Chester ya que se encuentra en pleno centro de la ciudad, aun paso de la calle principal y en una zona con bastantes pubs y bares en los que tomar algo, pero muy tranquila.

No es un hotel al uso sino que más bien se trata de un alojamiento familiar con tan solo 5 o 6 habitaciones pero en el que se cuidan todos los detalles. Las habitaciones no son demasiado grandes, sin embargo su decoración las hace muy acogedoras y cuenta con todo lo necesario para tener una estancia muy agradable.

Destaca especialmente la cama, muy cómoda y todas las habitaciones cuenta con un pequeño escritorio y con un set de café, té y galletas. Además hay Wi-Fi en todo el establecimiento y funciona bastante bien, lo que siempre es un detalle a tener en cuenta a la hora de escoger alojamiento, sobre todo en el extranjero.

Uno de sus puntos fuertes es la ubicación, en Grosvenor Place, una plaza ubicada en el centro de la ciudad histórica, dentro del recinto amurallado de Chester y a tan solo cinco minutos andando de la catedral. Perfecto para exprimir al máximo la estancia en la ciudad.

Una de las cosas que nos hizo decidirnos por este alojamiento donde dormir en Chester es que el desayuno está incluido en el precio de la estancia. Además, cuando hablas con el dueño te pregunta cuándo vas a querer tomar el desayuno y si decides hacerlo allí o en el Panini Press, un establecimiento que se encuentra a la vuelta de la esquina y con el que deben tener algún tipo de acuerdo.

Nosotros elegimos tomarlo allí, pensando que se hacía en el pequeño comedor de la planta baja pero qué va ¡te lo suben a la habitación! ¡Todo un lujo! Así que a la hora acordada nos subieron a la puerta un par de neveras monísimas que contenían nuestro desayuno continental: zumo, yogur, muesli, fruta fresca y un croissant con mantequilla, jamón y queso. Eso se completaba con el café y té junto con las botellitas de leche que había en la nevera de la habitación. La verdad es que estaba todo muy bueno y es todo un detalle que te dé la posibilidad de subirte el desayuno a la habitación.

El baño, aunque algo pequeño está bastante bien equipado, con ducha, jabones y secador, un detalle que se agradece mucho en el invierno de Chester. Además no hay que preocuparse por el frío, ya que la calefacción funciona de maravilla y hay mantas extra en los cajones de la cama, por lo que es un buen lugar para refugiarse después de un largo día recorriendo la ciudad.

The Grosvenor Place es un lugar más que recomendable para dormir en Chester y descubrir los encantos de la capital y una de las ciudades más adorables del condado de Cheshire.

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