Uno de las zonas más curiosas que se puede conocer en Nueva York es sin duda la zona de Williamsburg, un pequeño distrito perteneciente al barrio de Brooklyn y que cuenta con un alto número de judíos entre sus vecinos, motivo por el cual Williamsburg es conocido con el sobrenombre del barrio judío de Nueva York.
Conocí el barrio judío de Nueva York gracias a la excursión Contrastes de Nueva York, que me llevó por distintos barrios y zonas de la ciudad, incluido Williamsburg, el llamado barrio judío de Nueva York, fue sin duda uno de los sitios más interesantes que conocimos, debido principalmente a las diferencias culturales de sus habitantes, guiados por un código religioso, moral y social que resulta muchas veces curioso para las personas que somos ajenas a esta religión.
Y es que las personas judías rigen su conducta en base a los 613 mandamientos que los guían, aunque bien es cierto, que son solo 12 los que se siguen a rajatabla. El más famoso de estos mandamientos es sin duda en «Sabbath», el famoso día de descanso de los judíos, en el que no hacen absolutamente nada más allá de ir a la sinagoga.
Las curiosidades de la población de este barrio judío de Nueva York se pueden contar por cientos. Una de ellas es que los judíos visten de negro. Otra, es que los hombres se dejan su tan característica barba una vez que están casados. Entre ellos hablan en hebreo, siendo este el segundo idioma más hablado de todo Brooklyn.
Llama la atención ver como muchos judíos llevan gafas (prácticamente la totalidad de ellos). Esto es debido a un defecto en su ADN causado en parte por los casamientos entre familias, muchas veces en bodas que son programadas por los propios padres. La sociedad judía es una sociedad en la que las familias se suelen ayudar mucho entre ellas.
El tema del sexo en el matrimonio también tiene sus curiosidades. Si el hombre quiere tener sexo deja su sombrero sobre la ventana, y si la mujer quiere, lo recoge y lo deja sobre la cama para hacerle entender que está por la labor. No usan preservativos nunca, por lo que las familias judías suelen ser familias con un gran número de hijos.
Otra de las curiosidades más raras de los judíos atañe directamente a la mujer casada. Y es que las mujeres casadas no pueden tener el pelo largo, ya que se las considera capaces de seducir con su pelo, por lo que han de llevar el pelo corto, aunque eso si, muchas de ellas, utilizan pelucas para salir a la calle.
Se supone que tampoco pueden tener dinero y sin embargo los judíos aglutinan grandes fortunas. De hecho se rumorea que son dueños de muchos de los diamantes y gran parte de los taxis que encontramos en Manhattan.
Al visitar la zona de Williamsburg es inevitable el tirar muchas fotografías a las calles para intentar captar imágenes del estilo de vida de los judíos. Muchas veces sin embargo, cruzamos la línea que separa la educación de la falta de respeto hacía los habitantes de esta zona, de tal manera que los judíos se sienten atacados al verse como objetivos de las cámaras. Por eso insisto mucho en que a la hora de fotografiarlos, hay que intentar hacerlo con cierto disimulo y sobre todo con mucho respeto hacia ellos.
Por cierto, que uno de estos respetos, me llevó incluso a mantener una larga conversación con el dueño de una zapatería judía, quien amablemente me explicó su historia y cómo se ganaba la vida, al mismo tiempo que no le importó posar sonriente para la cámara. Y es que sabiendo hacer las cosas, se llega a cualquier sitio, incluso al corazón de Williamsburg.
La mejor forma de conocer Williamsburg, el Bronx, Queens o cualquier otra zona fuera de Manhattan, es mediante la excursión de contrastes de Nueva York. Una excursión muy popular y que hace casi todo el mundo. Aquí os dejo la empresa con la que la hicimos en español y la verdad que fue todo un acierto, de verdad que os recomiendo hacerla.
-Sigue todas las novedades del blog y no te pierdas nada siguiéndonos por nuestros canales de Facebook, Twitter, Instagram y Youtube. Así nos ayudas a crecer. Gracias.
Booking.com
Fue uno de los barrios que más me impactó de Nueva York! Más que el Bronx!
Un sitio diferente, a mi también me gustó más que el Bronx, tiene un encanto especial! Un saludo!
Me gusta mucho daber de ellos de los judios,,y como quisiera un dia poder visitar un barrio judio
Aquí se habla de «los judíos» como un colectivo hemogéneo cuando en realidad es todo lo contrario, dependiendo de su origen o de su nivel de observancia. Hay muchísimas diferencias y no es todo lo mismo.
El shabat, además de ir a la sinagoga, se caracteriza por ser una jornada de introspección y evaluación, pero también para reunirse con amigos y familiares para celebrar.
Lo de las gafas y el defecto en el ADN no se dónde lo sacó. Yo, por ejemplo, no uso anteojos.
Con respecto al sexo , los matrimonios más observantes -al igual que las parejas católicas muy religiosas- no suelen usar métodos anticonceptivos, aunque pueden pedir autorización a un rabino para utilizarlos. Esto corre para los judíos ortodoxos; el resto usará preservativo para el caso que lo crea necesario.
Tampoco es cierto que no se pueda tener dinero, solo que no se lo puede utilizar durante shabat. La historia de los judíos y el comercio es muy antigua y está ligada a la imposibilidad que tuvieron durante siglos de acceder a puestos de gobierno o de la justicia.
Y por último: si estoy en la calle y alguien empieza a sacarme fotos voy a mirarlo/a raro. No me va a gustar nada. Porque vamos, a nadie le gusta eso.
Gracias por tu aporte!
El guía del autobús fue muy amable y explica muy bien,,lo cogimos el lunes 23 de septiembre a las 5 de la tarde.
Me alegro mucho de que os gustara la excursión!Yo la verdad es que siempre la recomiendo. Un saludo!