Si hay un monumento que se ha convertido en símbolo de la ciudad de San Francisco es es, sin ninguna duda el puente Golden Gate.

El que fuera en a de las mayores obras de ingeniería de su tiempo, es hoy uno de los monumentos que ningún turista se quiere perder cuando vista San Francisco y es que, no sabemos por qué, pero su silueta es como un imán para las fotografías. En este post os contamos la historia y curiosidades del Golden Gate, el símbolo de San Francisco.

Historia y curiosidades del Golden Gate, el símbolo de San Francisco

Lo cierto es que el puente Golden Gate recibe el nombre con el que John Fremont bautizó en 1846 al estrecho que da paso a la Bahía de San Francisco. Aunque la verdad es que Fremont no fue muy original ya que, tradicionalmente al estrecho del Bósforo ya se le conocía con el nombre de “la Puerta dorada”. Hasta su construcción, era el sistema de ferris el que se encargaba de transportar los coches de un lado al otro de la bahía, pero el crecimiento del tráfico rodado fue tal que hubo que proyectar puentes después de la Primera Guerra Mundial.

El puente Golden Gate une la península de San Francisco por el norte con el sur del condado de Marin y es el puente más famoso de la zona, aunque el principal sigue siendo el Bay Bridge, en la ciudad de San Francisco.

La estructura fue proyectada por el ingeniero John Strauss y se construyó entre 1933 y 1937, no sin antes luchar por la financiación tras el derrumbe de la Bolsa de Nueva York en 1929. En el momento de su construcción fue la estructura colgante más larga y elevada del mundo, con casi 2 km de estructura colgante.

Pero el ingeniero John Strauss, del que puede verse una estatua al lado del puente, fue también un pionero en cuanto a la seguridad laboral ya que introdujo algunas medidas de seguridad inexistentes en la época como la obligatoriedad de usar casco, guantes y gafas o la rede de seguridad que mandó instalar bajo el puente. A pesar de todas estas medidas y esfuerzos, muchos obreros perdieron la vida durante la construcción del Golden Gate.

En el centro de visitantes, varios paneles y exposiciones informan sobre la historia del puente, su construcción y los números y cifras que rodean a este coloso, símbolo indudable de la ciudad de San Francisco.

Por ejemplo, una de las curiosidades del puente es de dónde viene su característico color rojo anaranjado y no es de otra cosa que del protector original contra el óxido. Gustó tanto en su momento que decidieron que el color de la pintura sería ese.

El puente tiene una calzada con seis carriles, tres en cada sentido, aunque se cambia el sentido según las exigencias de la circulación, y lo cruzan aproximadamente 40 millones de vehículos cada año. Además, la estructura del Golden Gate está proyectada para soportar rachas de viento de hasta. 160 km/hora. De hecho, solo ha sido necesario cerrarlo en tres ocasiones a causa de los fuertes vientos.

Además, y ojo a este dato que es bastante friki, se calcula que con la cantidad de alambres de acero que componen sus cables, se podría dar la vuelta al Ecuador hasta tres veces. Sin embargo, el Golden Gate registra un elevado número de suicidios al año. Esa es la razón por la que en 2014 se colocó una malla de acero a lo largo de todo el puente. Las vistas desde lo alto del puente de toda la ciudad de San Francisco son maravillosas.

Uno de los mejores lugares para fotografiar el Golden Gate es la zona de Presidio. Este área tiene su origen en la fortaleza que mandó levantar en 1776 José Joaquín Moraga, uno de los primeros colonos españoles que llegó a la bahía. Después, Fort Point, fue utilizada para defender a los barcos que transportaban el oro de California a través de la bahía. Y hoy en día alberga u n museo de armas y uniformes militares, además de algunos restos de la fortaleza.

Una de las actividades a más habituales entre turistas y también muchas de las familias de la bahía, es la de explorar la Golden Gate Recreational Area. Muchos llegan en bici y aprovechan para dar una vuelta por esta zona protegida. Nosotros aprovechamos nuestra visita al Parque Golden Gate y a la California Accademy of Sciences para acercarnos al puente Golden Gate cogiendo el autobús número 28 que además, como toda la red de autobuses y tranvías (incluidos los tranvías históricos) están cubiertos con la tarjeta turística San Francisco City Pass.

También es posible hacer buenas fotos desde el agua así que un crucero por la bahía de San Francisco es una genial idea para fotografiar y acercarse a conocer el Golden Gate desde otro punto de vista. Si quieres hacer un crucero por la bahía de San Francisco, puedes reservarlo aquí.

Pero si lo que quieres es además disfrutar como un auténtico marinero, lo tuyo es el paseo en catamarán, donde si lo deseas podrás ayudar a la tripulación con las velas y el timón, o simplemente sentarte a disfrutar de las vistas. Puedes resérvalo aquí o en este otro enlace, si lo que quieres es disfrutar de la magia de la bahía al atardecer.

¿Que te sabe a poco? Debes saber que también existe la opción de sobrevolar el Golden Gate  y toda la bahía de San Franciscoa bordo de un hidroavión. Si tienes curiosidad y quieres hacerlo así, puedes contratar el tour desde aquí.

Puedes ir a pie, cruzarlo y pasarlo por encima, o por debajo, ya sea en un barco, en un catamarán, o en un hidroavión, pero lo que es cierto, es que el Golden Gate, es posiblemente el puente más famoso del mundo, y acercarse a conocerlo es una de las cosas obligatorias que hacer en San Francisco.

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