Si hay un museo que visitar en Edimburgo, ese sería sin duda el Museo Nacional de Escocia. Situado en el centro de la ciudad, su importancia no solo reside en el título de su nombre, sino en algunos de los tesoros que guarda en su interior, entre el que destaca, muy por encima de los demás, la enigmática oveja Dolly, el primer animal clonado de la historia, un ser lleno de misterio aún años después de su muerte que atrae a numerosos curiosos.

El Museo Nacional de Escocia se encuentra en el centro de Edimburgo, a solo unos pocos pasos de algunos de los lugares más carismáticos de la ciudad, como la Royal Mile o el cementerio de Greyfriars. Es de entrada totalmente gratuita, y por supuesto es de visita obligatoria, porque como ya hemos mencionado anteriormente, en su interior se encuentra la archiconocida oveja Dolly, el primer animal clonado de la historia.

Podríamos decir que el Museo Nacional de Escocia se encuentra dividido en cinco secciones (Culturas del mundo, naturaleza, Arte y Diseño, Ciencias y Tecnología y finalmente historia de Escocia) a las que se van accediendo desde su gran patio central, por cierto, una pequeña obra de arte en si mismo, con unas escaleras y barandillas llenas de encanto.

¿Qué ver en el Museo Nacional de Escocia?

Aconsejo visitar aunque no se disponga de mucho tiempo la zona de Escocia, para conocer un poco mejor la historia del país y comprender muchos de los hechos que aquí ocurrieron. Conocer la historia de la masacre de Glencoe o la historia de los jacobitas nos servirá para comprender mejor la cultura de este hermoso país. Entre los múltiples objetos que se exponen, llama la atención el ajedrez de la isla de Lewis, del siglo XII, y uno de los objetos más preciados del Museo Nacional de Escocia.

¿El ajedrez no llama demasiado vuestra atención? Tranquilos, el museo cuenta con algunas piezas que os dejarán con la boca abierta, de eso estoy seguro. Una de las más carismáticas es sin duda el conocido como Millenium Clock Tower, un enorme y viejo reloj que marca las horas mostrando diversas figuras de época escocesas y que es todo un espectáculo. Desde luego que no podéis iros del Museo Nacional de Escocia sin escucharlo tocar al menos una vez, pues estoy seguro de que no os dejará indiferentes.

Pero sin duda, la joya de la corona de este museo es la oveja Dolly, posiblemente el mamífero más famoso del mundo y por el cual la visita a este museo ya está más que justificada. Lo encontraréis en una vitrina giratoria en una de las alas del museo y a pesar de lo que pudiera parecer, lo cierto es que es relativamente fácil conseguir una foto con ella. Además de Dolly, el Museo Nacional de Escocia cuenta con una gran colección de animales en su sección de naturaleza, y por lo tanto, una de las favoritas de los más pequeños.

El Museo Nacional de Escocia cuenta también con una cafetería y con una gran terraza que, a modo de mirador, brinda vistas desde lo alto de la ciudad de Edimburgo. Desde luego y personalmente, recomiendo la visita como una de las cosas que hacer en Edimburgo, pues no uno tiene todos los días la oportunidad de visitar a la famosa oveja Dolly en persona.

-Sigue todas las novedades del blog y no te pierdas nada siguiéndonos por nuestros canales de Facebook, Twitter, Instagram y Youtube. Así nos ayudas a crecer. Gracias.