Los Picos de Europa es una de las zonas montañosas más bonitas de España. Anclado en plena cordillera cantábrica, su cercanía al mar provoca que en este macizo montañoso  cuente con varios accidentes geográficos de gran interés, haciendo de los Picos de Europa, el segundo Parque Nacional más visitado de España, superado solamente por el volcán del Teide en las islas Canarias.

Desde luego que, si a uno le gusta la naturaleza, los Picos de Europa es uno de esos lugares obligatorios en el que pasar unos días en cualquier ruta por Cantabria. Iglesias, pueblos con mucho encanto, naturaleza y gastronomía son solo algunas de las cosas que los Picos de Europa ofrecen, y que hacen las delicias de los visitantes.

En esta entrada te propongo 10 cosas imprescindibles que ver y que hacer en los Picos de Europa, perfectas para disfrutar de esta zona de Cantabria durante unos días.

-Visitar el monasterio de Santo Toribio de Liébana

Desde que Beato de Liébana redactase aquí los comentarios del Apocalipsis de San Juan en el siglo VIII, este monasterio se ha convertido en todo un referente para el cristianismo. Situado a muy pocos kilómetros de Potes, este monasterio ha recibido la Bula Papal por la que se estableció el Jubileo Lebaniego, celebrándose siempre que el 16 de Abril, día de Santo Toribio, coincide que cae en domingo.

-Cruzar el Desfiladero de la Hermida

Formado por estrechas gargantas del macizo de Ándara a orillas del río Deva, y con paredes de roca de hasta 600 metros de altitud, el Desfiladero de la Hermida cuenta con 21 kilómetros de longitud, lo que hace que se el desfiladero más largo de España. Es practicamente imposible no tener que cruzarlo varias veces con el coche en una ruta por los Picos de Europa, pero igual de cierto es, que es todo una gozada hacerlo. Es sin duda una de esas cosas obligatrorias que ver y que hacer en los Picos de Europa.

-Visitar la iglesia de Santa María de Lebeña

A mitad de desfiladero, nos encontramos con la iglesia de Santa María de Lebeña, una iglesia mozárabe que es el principal monumento prerrománico de Cantabria. Fue fundada en el siglo X por don Alfonso y Doña Justa, condes de Liébana, y conjuga de forma armónica influencias islámicas y visigodas.

Destacan sus arcos de herradura, así como los capiteles de la iglesia y el pequeño cementerio que hay al lado. Tampoco hay que olvidarse de ver el tejo que hay al lado de la iglesia (hoy en día partido por culpa de un rayo que le cayó en 2007, y que representa junto a un olivo que hay el amor entre Alfonso y Doña Justa.

-Potes, la capital de los Picos de Europa

Petes además de ser considerada la capital y centro neurálgico de la Comarca Lebaniega, es el punto de entrada a los Picos de Europa, por lo que es una de las localidades más visitadas de Cantabria. Torres, casonas, iglesias y puentes son algunos de los encantos de un pueblo que enamora y por el que es una gozada perderse.

-Mogrovejo, y el encanto de los pequeños pueblos de montaña

Una de las cosas que hacer en los Picos de Europa es sin duda dejarse seducir por el encanto de sus pequeños pueblos de montaña. Mogrovejo reúne todo aquello que se espera de un pueblo de montaña. Pequeño, con mucho encanto y envuelto en un paisaje espectacular, Mogrovejo es sin duda el mejor ejemplo de pueblo con encanto en los Picos de Europa, y una de las estampas más típicas de la zona de Liébana.

Mogrovejo está declarado Conjunto Histórico, y combina de forma armónica las típicas casonas montañesas de estilo barroco con los escudos familiares y la arquitectura tradicional de la comarca. Sin duda es una de las visitas más típicas que hacer en los Picos de Europa.

-Probar su rica (y muchas veces contundente) gastronomía

España es un país en el que se come de maravilla, y en cuestiones de gastronomía, el norte se suele llevar la palma. Comida riquísima y en grandes cantidades. Solo hay que fijarse por ejemplo en el famoso cocido montañés o en el lebaniego, dos de los platos más típicos de la gastronomía de Cantabria, o en la gran variedad de quesos de la zona, o en sus embutidos de carne de caza, sus raciones de almejas, de anchoas de Santoña, sus pescados o sus rabas. Y eso sin nombrar los postres, donde el sobao pasiego es la estrella, pero hay muchos más: corbatas, chochitos… ¡esto es un no parar!

-Visitar el Parque Nacional de los Picos de Europa

Está claro que una de las cosas que hay que hacer en los Picos de Europa es recorrer el Parque Nacional del mismo nombre, con cumbres que superan los 2500 metros de altura. Flora, fauna y formaciones geológicas alucinantes configuran el perfil de un paisaje que no deja indiferente a nadie. En la localidad de Sotama, se encuentra el Centro de Visitantes de los Picos de Europa, donde obtener más información y una visión general de los Picos de Europa para preparar la visita.

-Subir al teleférico de Fuente Dé

Sin duda que se trata de la atracción más conocida de los Picos de Europa. Subir al teleférico de Fuente Dé es algo obligatorio, pues permite salvar un gran desnivel en muy poco tiempo, y te abre las puertas de par en par de una buena ruta senderista por los Picos de Europa. Las vistas desde lo alto del Mirador del Cable, lugar al que lleva el teleférico de Fuente Dé, son sencillamente maravillosas. Eso si, para visitarlo os recomiendo ir con tiempo, pues es normal que tengáis que esperar un buen rato para poder subir, pues van dando turnos de subida, aunque la espera vale mucho la pena.

-Visitar Tudes, elegido uno de los pueblos de Cantabria

En Cantabria se otorgan unos galardones a los pueblos que reúnen la belleza, el paisaje, las costumbres y las tradiciones de Cantabria, y Tudes tuvo el honor de ser elegido como «Pueblo de Cantabria» en el año 2010. Al encontrarse a muy pocos kilómetros de Potes, en plena puerta de entrada de los Picos de Europa, es imposible no acercarse a disfrutar del ambiente rural y tradicional de sus calles, y disfrutar de la arquitectura montañesa de sus casas.

-Subir a mirador del oso en el Collado de Llesba

Es cierto que encontraremos distintos miradores a nuestro paso por los Picos de Europa, pero posiblemente ninguno tan espectacular como el llamado mirador del Oso en lo alto del Collado de Llesba, el cual está situado en lo alto del puerto de San Glorio. Carretera de montaña en buenas condiciones, y lo único, es estar atento por si nos encontramos con alguna vaca rondando la carretera, cosa normal por estos lares.

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