Oporto, Resumen del viaje: Dia 2

Tras dormir como auténticos troncos debido al cansancio acumulado nos levantamos relativamente pronto y tras un fuerte desayuno (el dia iba a ser muy largo y la agenda estaba cargada para hoy) salimos del hotel y nos acercamos lo primero a la iglesia de Lapa, una iglesia muy próxima al hotel en cuyo interior se encuentra el corazón del rey Pedro IV, y que cuenta con un pequeño cementerio muy bonito y viejo, donde está enterrado Camilo Castelo, uno de los escritores más famosos que ha dado Portugal. El cementerio está abierto todos los dias de 8 a 12 y de 14:30 a 17 horas, y la verdad que es precioso, aunque como digo, muy pequeño.

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Tras visitar el cementerio nos dirigimos al centro, bajando por la Rua Santa Catarina, calle que nos habían recomendado al ser la calle de tiendas de la ciudad y al encontrarse en ella la Capilla de las Almas y el famoso Café Majestic.

En esta ocasión no entramos a la capilla (entrariamos otro de los dias) y nos desviariamos un momento de esta calle para ver el famoso Mercado do Bolhão (del que hablé aqui), un mercado de los de antaño, viejo y lleno de pequeños puestos. Uno de esos mercados que ya no se ven y que se ha convertido casi casi en una clase viva de historia.

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Tras el mercado, volvimos de nuevo a la Rua Santa Catarina para ver casi al final de la calle el Café Majestic, otro de los locales históricos que ofrece la ciudad, un café de los de época, de aquellos que un día estuvieron frecuentados por intelectuales y bohemios, y hoy en día acoge a muchas de las personalidades que visitan la ciudad.

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Aquí pasaba muchas horas J.K.Rowling, autora de Harry Potter el tiempo que estuvo viviendo en la ciudad, y no es descabellado pensar que algunas de las aventuras de Harry pudieran haber nacido en el interior de este local, ya que como ella misma reconoció Oporto le ha servido de inspiración para algunas cosas de  Harry Potter. (La librería Lello que visitamos otro de los días es uno de esos ejemplos)

Muy cerca del café Mejestic nos encontramos con la iglesia de San Ildefonso, de 1739 y que tienen en su fachada más de 11000 azulejos. Es muy bonita para visitar aunque no es de las más famosas de Oporto.

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Portugal es un país muy católico y las iglesias abundan allí por donde vas. Tras ello, fuimos hacia la famosa muralla fernandina, la muralla que protegía antiguamente a la ciudad, siguiendo su ruta hasta bajar a la ribera, la zona con más encanto de la ciudad, patrimonio de la humanidad por la UNESCO.

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Allí, junto al puente de Luis I (el puente más famoso de Oporto) pudimos observar Villanueva de Gaia al otro lado del Duero, allí es donde se encuentran las bodegas de vino de Oporto que visitaríamos los siguientes días y en nuestro lado del puente, la Ribeira, la imagen típica de la ciudad, sus casas viejas de colores con sus sábanas tendidas. Y por qué no decirlo, también sus restaurantes, multitud de turistas y demás negocios para ellos….

Uno de esos negocios son los cruceros. No somos muy amigos de caer en todo lo preparado para turistas, pero por esta vez accedimos a ello. Realizamos el crucero de los 6 puentes que llaman, recorriendo los puentes de Oporto y llegando hasta la desembocadura del Duero. Todo muy «turista» pero aun así muy bonito y perfecto para sacar buenas fotos. El crucero dura 50 minutos y vale 10 euros (8 con la Porto Card)

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Después del crucero y viendo la hora que era tocaba comer. Como una parte importante de los viajes es la gastronomía, buscamos un restautante típico portugués y alejado de la ribera (los precios alli son importantes). En esta ocasión encontramos cerca del Palacio de la Bolsa un portugués en el que por muy poco precio probamos un arroz caldoso con pulpo y un caldo de ave espectaculares, y de beber un vinho verde típìco del país.

Tras la comida visitamos el Palacio de la Bolsa, otro de los imprescindibles de la ciudad. El palacio es de 1842 y hoy es la sede de la Cámara de Comercio de Oporto. En su interior destaca la sala arábiga,con un toque color oro e inspirada en la Alhambra. Ofrecen visitas guiadas y las fotos están prohibidas. Por cierto, lo alquilan para bodas…

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A la salida de la bolsa y debido a su proximidad visitamos la casa del infante Don Henrique el navegante, uno de los mayores descubridores que ha dado Portugal. Su casa es hoy en día un museo de la história de la ciudad. Con la Porto Card la entrada en gratuita.

Tras ello, visitamos la iglesia de San Francisco, sin duda una de las iglesias mas bonitas que he visto en toda mi vida. Y es que todo el interior está decorado en oro. La verdad es que te quedas embobado nada mas entrar. Las fotos están prohibidas, aunque no las controlan, y por cierto, también hacen descuento con la Porto Card. En esta ocasión no me aguanté y realicé alguna foto para poderla mostrar…

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Justamente nuestra salida de la iglesia coincidía con la llegada a la parada del famoso tranvía hasta Foz, otra de las cosas imprescindibles que hacer en Oporto. Foz es como ellos llaman a la desembocadura del Duero. Los tranvias en Oporto son viejisimos y tienen ese aire especial que parece que haces un viaje al pasado montado en ellos. El trayecto cuesta 2,50 euros.

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Por cierto, tuvimos la oportunidad de ver a jóvenes chavales portugueses ir agarrados por fuera sin pagar billete y verlos saltar de tranvia en tranvia así como escondiéndose cuando estábamos parados en los semáforos para no ser descubiertos era todo un espectáculo.

Aproximadamente en 15 minutos estábamos en la desembocadura y ya el mar, así que después de probar el agua del Atlántico decidimos dar un paseo recorriendo todas las playas de la ciudad, lo que nos costó cerca de dos horas…

Tras ello y ya destrozados, y casi en las afueras de la ciudad dimos por finalizado el segundo día contentos de ver todo lo que habíamos visto y mentalizados para el siguiente día, que se presuponía igual o más cargado incluso que éste.

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7 Responses to Oporto, Resumen del viaje: Dia 2

  1. Helena dijo:

    Debisteis acabar reventados, ¿no? No se cómo estarán de cerca o lejos los sitios que mencionas, pero vamos, no parasteis!!
    Me ha gustado lo del crucerito, a veces viene bien caer en alguna de las tentaciones «turísticas», jejeje
    Un saludo

  2. xipo dijo:

    Hola Helena!!

    Pues la verdad que acabamos reventados si…. hubo un momento en el que ya solo pensaba en volver al hotel y quitarme los zapatos…. jeje

    Lo del crucero estuvo bien, pero es que no soy muy partidario de hacer lo tipico para turistas…… no me gusta ir a las cosas hechas para turistas como si fueramos borregos…. pero bueno, estábamos de vacaciones y un dia es un dia…jeje

  3. Todo lo que se ve en la foto de iglesia de color dorado es madera, no oro! Del propio estilo gótico (con un toque románico) de la iglesia
    Saludos

    • xipo dijo:

      Bien Rubén!!! No se si me lo dices en serio o me estás vacilando…..

      Al decir oro, creo que se entiende que me refiero a «pan de oro» que es realmente como se llama a ese recubrimiento….
      Si fuera oro ¿crees que dejarían que la gente andara por alli a su aire? Pondrian algo de seguridad o vigilancia ¿no?
      Pero para la próxima intentaré ser más explicito….
      De todas formas gracias por el comentario!!

  4. Verónica dijo:

    Este comentario es para contestar a Rubén: Todos los retablos y estructuras decorativas de la iglesia están realizados en madera con un recubrimiento de pan de oro, y aunque la iglesia se comenzó a construir en el gótico (que va después del románico), el estilo decorativo que domina en el edificio es el barroco, en concreto del siglo XVII, que se caracteriza por las columnas salomónicas que predominan en la mayoría de los retablos. Espero haber aclarado tus dudas.

  5. Hicisteis bien en dormir bastante, porque menuda pateada el primer día completo en la ciudad.

    Preciosas las vistas desde el puente de Luis I y menudo show los chicos de Oporto se las saben todas en el tranvía, haberos animado 😛

    Saludos!!!

  6. xipo dijo:

    Jose Carlos!!!

    La verdad que los jóvenes portugueses (Cristianos Ronaldos en potencia) se las saben todas!!! La verdad que era un espectáculo verlos saltar de tranvía en tranvía…